La guionista y escritora Gillian Flynn (“Perdida”), junto al propio director, supera con cierto éxito el reto de adaptar una historia claramente anclada en los 80 aunque no puede evitar ser enfática, algo condescendiente y, en cierta medida, oportunista.
A nivel narrativo la película funciona bastante bien aunque se detecta cierta pérdida de interés hacia la historia conforme avanza el metraje. Aún así es muy de agradecer la fisicidad y sordidez de los ambientes descritos y una estructura basada en escenas cortas que hacen que la trama avance constantemente, algo que se echa a faltar en gran parte del cine actual.
En definitiva, un entretenimiento cinematográfico de primer nivel con notables interpretaciones, buen uso de los medios técnicos con los que se cuenta y con tiempo para reflexionar sobre temas de interés social. No es poco, desde luego.
Reino Unido-Estados Unidos, 2018.- 124 minutos.- Director: Steve McQueen.- Interpretes: Viola Davis, Michelle Rodriguez, Elizabeth Debicki, Colin Farrell, Brian Tyree Henry, Daniel Kaluuya, Liam Neeson, Robert Duvall, Cynthia Erivo, Jacki Weaver,.- DRAMA.- Adaptación cinematográfica de una miniserie británica de 1983, aquí ambientada en Chicago en la actualidad, sobre cuatro mujeres con nada en común excepto una deuda heredada por las actividades criminales de sus difuntos maridos. Verónica, Alice , Linda y Belle deciden tomar las riendas de su destino y conspiran para forjarse un futuro con sus propias reglas.