Ya sólo por la inconmensurable creación, más allá de una simple interpretación, de Jessica Chastain en ‘Los ojos de Tammy Faye’ vale la pena ver el film. Además, el trabajo de maquillaje y peluquería es soberbio y la ambientación en más de 30 años de la historia de Estados Unidos está muy conseguida, logrando evitar la mayoría de excesos grotescos en los que suelen caer los biopics (películas biográficas) que van desde la infancia a la edad adulta de los protagonistas. De forma adicional, el film aporta un interesante didactismo sobre el funcionamiento de las congregaciones cristianas no católicas en Estados Unidos.

Sin embargo, en la dirección y el guion sí que se detectan problemas de consideración. Por un lado, se intentan narrar tantos hechos de la vida de la protagonista (aunque se evitan otros, como su segundo matrimonio) que la narración acaba siendo fatigosa. Pero el mayor problema es el punto de vista desde el que se enfoca al personaje principal. La película (y su productora, Jessica Chastain), en su loable afán de intentar hacer un retrato bajo la óptica feminista, parece redimir de todo pecado a la protagonista y olvida que fue indiscutible cómplice de una multimillonaria estafa que se aprovechaba de la buena fe y las creencias religiosas de millones de estadounidenses, focalizándose casi exclusivamente en los aspectos en los que cuestionaba el evangelismo como su despreciable actitud ante los homosexuales y los enfermos de SIDA.
Indudablemente, el cabecilla fue su deleznable marido, pero retratarla como una víctima que no se enteraba de nada creo que hace un flaco favor a la protagonista y no ayuda a la causa feminista.
Esta película se estrenó en cines el 4 de febrero de 2022 y está nominada a 2 Oscars: mejor interpretación y maquillaje.
DRAMA BIOGRÁFICO.- Biopic del extraordinario ascenso, caída y redención de la telepredicadora evangelista Tammy Faye Bakker. En los años 70 y 80, Tammy Faye y su marido, Jim Bakker, pusieron en pie prácticamente de la nada la red de cadenas religiosas más grande del mundo, así como un parque temático, y gozaron de una inmensa popularidad gracias a sus mensajes de amor, aceptación y prosperidad. Tammy Faye era legendaria por sus pestañas indestructibles, su original forma de cantar y su generosidad a la hora de acoger a personas de todo tipo. Pero no pasó mucho tiempo antes de que las irregularidades financieras, las rivalidades e intrigas y los escándalos derrocaran un imperio construido con gran meticulosidad. (Fuente: FILMAFFINITY)