El pasado 31 de de julio recibía una invitación para participar en una atractiva iniciativa de una marca de ginebra americana, Seagram’s Gin, en Alicante. Se trataba de cuatro noches de proyecciones de clásicos de cine sobre una tarima flotante en el mar. La invitación me pareció muy formal y el evento, más que interesante. Así que no lo pensé mucho y acepté las invitaciones para las cuatro noches que, además, incluían un acompañante.
Hasta el día 6 de agosto, fecha de inicio del evento, no tuve más información de la que me habían comentado por teléfono o había leído en los diarios. Pensé que se trataba de unas noches con cine en el mar muy interesantes, pero no imaginé que lo fueran tanto.
El día 6 de agosto nos citaron a las 20:15 en el muelle 4 del Puerto de Alicante a los 150 invitados de este primer día. Tras confirmar que estábamos en la lista de invitados nos instaron a subir a un barco que nos llevaría a la tarima flotante. En unos 15 minutos de agradecida travesía marítima, debido al calor, divisamos la tarima que estaba amarrada al muelle.
Mis mejores expectativas se vieron superadas tan sólo al acercarnos a la tarima, de unos de 350 m2, donde un grupo de músicos, azafatas y barmans nos saludaban desde la misma. En la gran pantalla ya se visionaba el título de la película que disfrutaríamos ese día, Desayuno con diamantes de Blake Edwards, tal y como indicaban las invitaciones.
Todo estaba cuidado al detalle lo que, junto a la extraordinaria música de jazz interpretada por Copa Ilustrada Band, nos sumergía en el mejor ambiente clásico americano
Sin embargo, la sorpresa fue aún mayor cuando, tras bajar del barco entre flashes, música, cámaras de televisión e incluso una alfombra, llegamos finalmente al interior de la tarima. Todo estaba diseñado al detalle. La magnífica orquesta Copa Ilustrada Band y los barmans de Seagram’s gin amenizaron el momento hasta la proyección con música y gin tonics, mientras que los azafatos y azafatas nos ayudaban en todo momento. Todo el equipo, barmans y azafatas vestían de amarillo y blanco con un estilo ‘vintage’ de los 60. Todo ello, junto a la extraordinaria música de jazz interpretada por Copa Ilustrada Band nos sumergía en el mejor ambiente clásico americano.
Otra de las gratas sorpresas llegó en el momento que decidimos sentarnos en nuestras butacas. Antes de entrar al espacio de los asientos, las azafatas nos entregaban una bolsa que contenía una gran caja de palomitas, un sobre con golosinas y una botella de agua mineral. Todo ello diseñado y cuidado hasta el mínimo detalle (incluso la botella de agua tenía el diseño del evento).
Una vez con nuestra butaca escogida, continuamos varios minutos disfrutando de la música y de los gin tonics hasta que la luz diurna fuera lo suficientemente escasa como para proyectar la película en condiciones idóneas. Fueron unos cuarenta minutos que pasaron volando. Mejor dicho, flotando en un ambiente de ensueño.
Una vez se hizo de noche, pudimos disfrutar de Desayuno con diamantes en una perfecta proyección en alta definición. Por momentos, el mar se agitaba de vez en cuando y la tarima se contorneaba dando una sensación muy placentera.
Nada más ver el rótulo de The End y levantarnos de nuestras butacas, los músicos ya comenzaban a amenizar la jornada nocturna y en la barra del bar ya se divisaba una gran fila de ‘Gin Tonics’ preparados
Tras esto, ¿qué más se podía pedir? Pues bien, la sorpresa fue aún mayúscula cuando, nada más ver el rótulo de ‘The End’ y levantarnos de nuestras butacas, los músicos ya comenzaban a amenizar la jornada nocturna, los barmans ya tenían una gran fila de gin tonics preparados y varios camareros comenzaban a traer bandejas de comida. Durante dos horas, nada de esto paró. Las bandejas de comida llegaban sin parar y siempre había gin tonics preparados en la barra del bar. Mientras tanto, la orquesta Copa Ilustrada Band daba muestras de una profesionalidad impecable, sin parar durante las dos horas de amenizar el momento con un repertorio de clásicos magnífico y perfectamente interpretado.
A la 1:30 de la madrugada se despidieron los músicos hasta el día siguiente y era hora de marcharnos. Si el evento ya nos había ganado con creces, el detalle de llevarnos de siete en siete hasta el parking del puerto entre varios Mercedes que llegaban cada cinco minutos, puso la guinda a una jornada increíble.
Y nos esperaban tres noches más de lo mismo, disfrutando de las proyecciones de Vértigo de Alfred Hitchcock, Historias de Filadelfia de George Cukor y El apartamento de Billy Wilder, los días 7, 8 y 9 de agosto, respectivamente.
Durante el resto de noches, y hasta el último minuto del evento, nada bajó de intensidad. Fueron cuatro noches inolvidables que espero vuelvan a repetirse en el futuro y en las que muchos más puedan disfrutar de esta extraordinaria iniciativa de Seagram’s Gin.
Hola, me ha gustado el artículo para poner los dientes largos a aquellos que no tuvieron o conocieron la suerte de ser uno de los invitados de tal formidable evento cuidado hasta el mínimo detalle y patrocinado por una marca de bebida alcohólica americana. Lo que me hubiera gustado también saber es la razón de la elección de Alicante por esta empresa, que pretenden con esta acción, sus objetivos y si ha sido un éxito o por el contrario ha pasado más bien desapercibido, porque pocas han sido las publicaciones y seguimientos de la noticia, así como esta breve crónica.
Si es una acción de product placement es importante potenciar su difusión y atraer a otras empresas porque el cine o lenguaje audiovisual puede ser una cita interesante y a la par muy beneficiosa para ambas partes. Mi queja, la elección de películas, clásicos con el mal doblaje de esa época, es verdad que estas retratan bien lo que la marca supongo que quiere vender el glamour relacionada con esta bebida, pero debemos educar al público en la importancia de ver las cosas en versión original.
Hola, Beatriz
Desconozco las razones comerciales de la empresa que ha organizado el evento. En mi opinión, su objetivo era de un impacto mediático puntual sobre la marca, tanto hacia los medios locales como a nivel nacional. Esta campaña de promoción, según me han informado, ha continuado en diversos puntos de la costa mediterránea y ahora marchan a la costa gallega. Sin embargo, la experiencia de las proyecciones de cine en la tarima flotante fue un evento exclusivo en Alicante y, por el momento, no parece que vayan a repetirlo.
En mi opinión, sí fue un éxito. Solo el hecho de las grandes listas de espera para acudir al evento es bastante significativo. Además, los dos grupos de comunicación audiovisuales más importantes, Atresmedia y Mediaset, cubrieron el evento. Yo mismo fui entrevistado por la agencia Atlas para Mediiaset.
Es evidente que se trata de una estrategia comercial de Product Placement o emplazamiento del producto que reunía todas las claves de un plan muy estudiado:
– Por una parte se ofertaba algo único y exclusivo
– Lo más importante era el desarrollo de imagen de marca con una investigación de motivos en relación con la demanda
– La publicidad subliminal estaba en todos lados. Comenzando por las propias películas, donde los protagonistas siempre estaban enganchados a la botella (huelga recordar «Historias de Filadelfia» de George Cukor o la propia «Desayuno con diamantes» de Blake Edwards, auténticas apologías del consumo de alcohol)
– Por otro lado se encontraban estrategias tipo «testimonio-experiencia», que incluye mi propio caso
– Y, sin duda, otro punto clave fue el factor «enigma»: ¿qué es? ¿de qué se trata? etc. Un recurso estratégico muy utilizado en, la publicidad americana moderna.
Estoy totalmente de acuerdo contigo en la promoción de la V.O.S. en los cines y en cualquier evento. Tal vez, se optó por las versiones dobladas debido a la posición de las butacas en la plataforma que, en algunos casos, podría haber resultado para muchos complicado el hecho de leer subtítulos.
Espero haber resuelto tus dudas, querida Beatriz.
Muchas gracias por participar con nosotros a través de tus comentarios. El feedback es vital para nosotros.
Muchas gracias Javier, por haber respondido a mis dudas. Veremos si en un futuro próximo otras empresas realizan actividades similares y además en Alicante porque sin duda es una gran iniciativa a copiar.
Un saludo