Del director de la también muy recomendable Purasangre, estamos ante una sólida y corrosiva crítica de la corrupción, pero también del concepto exclusivamente competitivo de la educación. Notable y adictivo guión.
Conviene saber lo menos posible sobre la trama y giros del guión para disfrutarla lo máximo posible. El manejo de qué información se nos aporta enseguida y cuál se reserva para bien avanzada la proyección es una de las claves del éxito de la película.
Brutal azote de la hipocresía de aquéllos que intuyen que algo huele a podrido en X (completen la incógnita a su gusto), pero miran hacia otro lado por conveniencia, que está perfectamente complementado con una caracterización de los personajes representantes de minorías muy alejada de la oportunista y, a veces, paternalista a la que nos tienen acostumbrados últimamente. Aquí son representados con respeto y empatía pero lejos de la hagiografía, que, a la larga, les perjudica más que otra cosa.
Estupenda, como siempre, Allison Janney y buen trabajo de Jackman que no tiene ningún problema en aparecer menos atractivo que de costumbre.
Esta película está disponible en la plataforma de streaming HBO.
Título original: Bad education. Estados Unidos, 2019.- 105 minutos.- Director: Cory Finley.- Intérpretes: Hugh Jackman, Allison Janney, Geraldine Viswanathan, Alex Wolff, Kathrine Narducci, Rafael Casal, Jimmy Tatro, Ray Romano, Kayli Carter, Annaleigh Ashford, Pat Healy, Stephanie Kurtzuba, Ray Abruzzo, Stephen Spinella, Catherine Curtin, Doris McCarthy, Finnerty Steeves, John Scurti, Jeremy Shamos, Hari Dhillon, Welker White, Lauren Yaffe, Kristoffe Brodeur, Peter Appel, Giuseppe Ardizzone, Victor Verhaeghe, Miriam Silverman, Hannah Kelsy, Kevin D. McGee, Gino Cafarelli.
DRAMA.- Frank Tassone es uno de los gerentes más destacados del distrito escolar de Roslyn, que vive para asegurarse que la educación de los alumnos sea la mejor que estos puedan recibir. Pero el escándalo salpica a una de sus subordinadas más cercanas.