El Museo de Aguas de Alicante ha presentado el primer refugio climático que se abre al público en la ciudad de Alicante. El acto, celebrado el 30 de septiembre, ha contado con la intervención de Sergio Sánchez, director general de Aguas de Alicante, y Amelia Navarro, directora de Sostenibilidad, Equidad y Acción Social.
Según ha declarado Sánchez Ríos, “como empresa mixta participada por el Ayuntamiento de Alicante, Aguas de Alicante practica la escucha activa de las necesidades ciudadanas como parte de su acción diaria. Así, surgió la posibilidad de aprovechar las especiales características climáticas que se generan dentro de los Pozos de Garrigós, con una temperatura constante a lo largo de todo año, para poner en marcha esta iniciativa que permite ofrecer al ciudadano de Alicante y a sus visitantes un espacio en el que encontrar esa ‘protección’ durante unas horas ante circunstancias climáticas adversas, cada vez más frecuentes en la zona mediterránea. Gracias a la planificación, a cierta inversión de recursos y a la adaptación de la agenda del Museo, es posible hoy [por ayer] esta apertura”.
Plan Estratégico 2022-2027: Lucha Contra el Cambio Climático
Para Aguas de Alicante, esta novedosa acción se enmarca dentro de su Plan Estratégico establecido para los años 2022 a 2027, en concreto, dentro del Eje Lucha Contra el Cambio Climático en el que la empresa trabaja, cuantifica y avanza con acciones que le implican con la lucha contra la crisis climática desde múltiples vertientes, tanto las que afectan directamente a la gestión que hace del recurso hídrico, como otras que trabajan en este ámbito de forma indirecta. En este caso, aprovechando unas instalaciones de titularidad municipal y gestionadas por la compañía Aguas de Alicante desde hace 15 años, dotando al espacio de comodidades y adaptando la agenda cultural del museo.
Con la finalidad de ofrecer al ciudadano un servicio más, el refugio estará inicialmente disponible en el horario habitual del Museo: de martes a viernes de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00, y sábado y Domingo de 10:00 a 14:00 (horario de invierno: de septiembre a mayo); y de martes a viernes de 10:00 a 14:00 y de 18:00 a 21:00, y sábado y domingo de 10:00 a 14:00 (horario de verano: de junio a agosto). Se evaluará, además, la posibilidad de ampliar este horario en los casos en que se decreten olas de calor.
Qué es y qué aporta un refugio climático
Ubicado en el interior de los Pozos de Garrigós, en concreto, en el denominado “Pozo 1” de este sistema de tres aljibes que data del S XIX, el espacio recién inaugurado es la respuesta a nivel local a una necesidad creciente que, por el momento, no tiene regulación a nivel estatal, tan sólo recomendaciones en el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático.
Tampoco en el ámbito de la Comunidad Valenciana en el que, si bien el tema de los refugios está contenido en la Ley de Cambio Climático de 2022, no se detalla al respecto de las características que deben tener estos espacios, y tan solo menciona la necesidad de crear una Red de Refugios Climáticos en la comunidad autónoma. Sí están en marcha ya iniciativas en el ámbito local para su creación, como los que se están llevando a cabo en algunas ciudades como Barcelona, Valencia o País Vasco, a las que se suma ahora Alicante.
No recogiendo expresamente la legislación cuáles deben de ser sus requisitos, de forma general se puede decir que los “refugios climáticos” son a día de hoy espacios en los que la ciudadanía puede protegerse del calor o del frío extremos durante unas horas, mientras dicho espacio mantiene su uso habitual. En esta categoría entran tanto lugares interiores, como bibliotecas o centros cívicos, y exteriores, como parques o interiores de manzanas; espacios para que, cualquiera que lo necesite y que viera comprometida su salud, pueda descansar adecuadamente para reducir los síntomas de estrés térmico, por lo tanto, deben disfrutar de condiciones climáticas adecuadas: interiores climatizados y exteriores sombreados.
En este sentido, el “Pozo 1” del Museo de Aguas de Alicante cuenta, gracias a la especial morfología del lugar, con una temperatura constante a lo largo de todo el año. Además, ha sido acondicionado para ofrecer a quien haga uso de él de un lugar confortable, que ofrece también acceso a puntos de agua y electricidad, servicios públicos y conexión a internet.
Alberga también vegetación adaptada a un espacio singular como éste, al tiempo que ofrecerá a quien lo solicite la posibilidad de recoger plantas de particulares en periodos vacacionales, que deberán tener siempre en cuenta las condiciones de temperatura y humedad del espacio. A esta iniciativa se han querido sumar tanto la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Alicante, como la Universidad de Alicante, a través de su Vicerrectorado de Cultura, que han donado una amplia bibliografía a disposición de todos sus visitantes.
Si bien no pueden ser soluciones únicas, porque no resuelven el problema de la climatología extrema, y deben ir acompañados de otras medidas de adaptación como el aumento de la cobertura verde, entre otras muchas, los refugios climáticos empiezan a desempeñar un papel esencial en nuestras ciudades, densas y urbanizadas. Mientras se avanza en estos otros ámbitos, las redes de refugios son críticas frente a la exposición a las denominadas «islas de calor urbanas», ayudando a reducir la exposición y mejorando la capacidad de respuesta en momentos de estrés térmico.