Weapons ha sido la sorpresa taquillera del mes de agosto en todo el mundo. El cine de terror suele funcionar bien en ingresos, pero no es habitual que un film de este género se sitúe tres semanas consecutivas como número 1 de taquilla. También es cierto que en dicho mes no hubo grandes estrenos comerciales, ya que las majors prefirieron concentrar “lo gordo” en julio para que les diera beneficios durante todo el verano y poder estrenarlas en septiembre en sus plataformas coincidiendo con “la vuelta al cole”.
La crítica en general ha recibido con los brazos abiertos el nuevo film del director de la notable Barbarian y la acogida del público también ha sido buena (6.8/10 en Filmaffinity, 7.6/10 en IMDB y 3.7/5 a fecha de 18 de septiembre), aunque con mayor discrepancia. Hay que tener en cuenta que estas puntuaciones eran más altas hace un mes cuando sólo la habían visto los espectadores que tenían pensado verla sí o sí y no el público que acudió después a las salas con el hype por las nubes a causa de la taquilla y las buenas críticas.
Evidentemente Weapons contaba en su contra con la sorpresa que supuso Barbarian, un film estrenado de tapadillo en Disney Plus sin pasar por las salas y que se ha convertido poco a poco en una cinta de culto. Nadie esperaba nada de ella y, por ello, todo lo que nos diera, iba a ser bienvenido.
Sin embargo, las expectativas con Weapons eran altísimas y, por tanto, la posibilidad de decepción estaba a la altura de las mismas. Además, Barbarian era una película de tesis, pequeña y de pocos escenarios, con uno de los mejores giros argumentales de los últimos años. Sin embargo, Weapons -con mucho más presupuesto- se puede permitir una construcción más poliédrica con una trama que se narra bajo diferentes puntos de vista.
Además no hay una tesis, una moraleja tan brillante como en su antecesora, sino un misterio que le hace preguntarse al espectador cómo el guion va a atar todos los cabos que está presentando y ATENCIÓN SPOILER los cierra con una explicación sobrenatural con una bruja mala que hace vudú y eso puede hacer ver al director como un trilero FIN DEL SPOILER .
Pero, en realidad lo que parece interesar al cineasta son tres cosas:
- Atraparnos con el juego narrativo al estilo Rashomon, en el que se cuenta la misma trama desde diferentes puntos de vista que tienen la misma o diferente información.
- Crear imágenes y secuencias impactantes que se recuerden por su mezcla de descarnado terror y humor nada inocente.
- Levantar un retrato demoledor de su país: desconfianza total en las figuras de autoridad, crispación insoportable, desprestigio de los educadores por parte de los progenitores, una actitud constante de bullying que los hijos heredan de los padres, corrupción y abuso de autoridad policial, la familia como lugar nada seguro donde se pueden cometer enormes atrocidades impunemente y, sobre todo, el PASADO más nefasto que vuelve en forma de autoritarismo que se niega a fenecer y que quiere alimentarse y transmitir sus ideas podridas a los más jóvenes.
El cineasta consigue gran parte de sus objetivos pero, como ocurría en Barbarian, el desenlace de sus historias no es lo que mejor se le da y algunas secuencias resultan algo alargadas. Aun así un triunfo del género y del cine comercial estadounidense.
Esta película se estrenó el 8 de agosto de 2025 en cines.
Título original: Weapons.- Estados Unidos, 2025.- 128 minutos.- Dirección: Zach Cregger.- Intérpretes: Julia Garner, Josh Brolin, Alden Ehrenreich, Austin Abrams, Cary Christopher, Benedict Wong, Amy Madigan, June Diane Raphael.- THRILLER DE TERROR.
Cuando todos los alumnos de una misma clase, salvo uno, desaparecen misteriosamente la misma noche y exactamente a la misma hora, la pequeña ciudad donde viven se pregunta quién o qué está detrás de su desaparición. (Fuente: FILMAFFINITY)