Bajo el lema “Agua y Energía”, Aguas de Alicante celebró recientemente su quinta Comunidad de Prácticas enmarcada dentro de B-WaterSmart, un proyecto europeo que tiene como objetivo fundamental la búsqueda de soluciones para avanzar en la economía circular en la gestión del ciclo integral del agua.
Organizada en colaboración con Cetaqua (Centro Tecnológico del Agua) y la Cátedra de Economía del Agua de Fundación Aquae y UNED, esta jornada permitió reunir a perfiles muy diversos: junto a investigadores de la Universidad de Alicante, el Centro Tecnológico del Agua y la Cátedra del Agua, participaron representantes del sector de la distribución de eléctrica ( i-DE); de la industria, por parte de FEMPA y CEMEX; la Comunidad de Regantes de Alicante Norte; especialistas en valorización de residuos (ACES); y del transporte urbano (Vectalia); además de Alicante Futura, la Asociación de Consumidores y el Centro Educativo de Recursos de Consumo de Alicante.
Los participantes fueron recibidos en el Museo de Aguas de Alicante por Ignacio Casals, responsable de Innovación, con un resumen del proyecto y el contexto para la sesión, exponiendo sobre los pilotos que se desarrollan en la “Ecofactoría” (Depuradora) de Rincón de León y que permiten incorporar residuos procedentes de otras industrias, como las agroalimentarias, en el proceso de tratamiento de los fangos de depuración, incrementando de forma exponencial la producción de biogás. También, sobre otro piloto basado en un nuevo modelo de turbina eléctrica que permite aprovechar los caudales circulantes en las plantas de tratamiento para la generación de electricidad. Así, en Alicante la estrategia se ha centrado en convertir las plantas de tratamiento de aguas residuales en las denominadas “ecofactorías”, maximizando la producción de agua regenerada, y produciendo nuevos recursos y energía.
A continuación, la presentación principal de la jornada estuvo a cargo de Miguel Angel Pardo, profesor e investigador de la Universidad de Alicante especializado en ingeniería hidráulica, quien ha explicado el peso del consumo energético del ciclo integral del agua en todas sus fases, un 4% dentro del consumo energético mundial, con un amplio margen de mejora por delante. El profesor Pardo habló también de las investigaciones llevadas a cabo en la Universidad de Alicante, con soluciones para la reducción del consumo energético en la gestión del agua, especialmente en el riego agrícola; o la puesta a punto herramientas para optimizar la aplicación de la energía solar fotovoltaica con este mismo fin.
La sesión continuó con una dinámica en la que los participantes debatieron las estrategias, palancas y barreras que pueden impulsar, por un lado, la generación de energía y la valorización de los residuos de un nuevo modelo de ecofactoría, y por otro, la reducción del consumo energético y el impulso de las renovables en el ciclo del agua. Entre sus principales conclusiones están: el peso de las actuales regulaciones y trámites administrativos, frente a la importancia positiva de “premiar” de forma activa la eficiencia energética y el ahorro de recursos hídricos; o la colaboración activa entre todos los actores implicados mediante encuentros como el que ha propiciado esta ocasión.
Qué es una Comunidad de Prácticas
En el contexto del proyecto B-WaterSmart, estas sesiones de Comunidades de Prácticas tienen como objetivo explorar las oportunidades, barreras y estrategias en la implantación de nuevas soluciones y tecnologías, junto a todos los actores relevantes del entorno. Son una pieza clave para, más allá de los experimentos, los pilotos tecnológicos y las pruebas de concepto, crear los “Living Labs” o laboratorios vivos en los que esas soluciones innovadoras se inscriben en un contexto efectivo de gobernanza, usuarios, ciudadanía, administraciones y otros muchos actores implicados en su aplicación en el mundo real.
Sobre B-WaterSmart
Apoyado por el programa europeo H2020, B-WaterSmart aúna los esfuerzos de 35 entidades internacionales por aumentar la creación de valor en torno al ciclo del agua, garantizando simultáneamente su disponibilidad para todos los consumidores. Para ello, en seis “Living Labs” europeos se están poniendo a prueba decenas de soluciones innovadoras de economía circular y optimización, que permiten generar materias primas y energía, fomentar el uso del agua reutilizada y hacer un uso más eficiente de los recursos: es la “Watersmartness”, la inteligencia del agua. Entre estos Living Labs, junto con Lisboa, Venecia, Flandes, Frisia Oriental o Bodo (Noruega), se encuentra la ciudad de Alicante.