La Associació Valenciana d’Escriptors i Escriptores Teatrals (AVEET) se reivindicó el pasado sábado en Alicante en el marco de la XXIX Muestra de Teatro de Autores Contemporáneos. La AVEET, que lleva desde 2013 visibilizando la dramaturgia valenciana, ejerce labores de formación, mediación y promoción de los autores teatrales de la comunidad y tiene en marcha diversas iniciativas novedosas para visibilizar a nuestros dramaturgos en la época pospandemia.
Al encuentro, que se llevó a cabo en el Instituto Gil Albert de Alicante, asistieron los escritores alicantinos Pedro Montalbán Kroebel, Antonio Cremades, Juan Luis Mira, Pascual Carbonell, Juli Disla y Josi Alvarado, así como los académicos Biel Sansano y Eduardo Pérez Rasilla y la secretaria de la asociación, Begoña Palazón.
El director de la Muestra, Guillermo Heras, quiso destacar que la literatura dramática valenciana es “de las más potentes” del territorio español. Sin embargo, los escritores asistentes abundaron en las dificultades de “escribir y estrenar desde el sur”.
La presidenta de la asociación, Sonia Alejo, insistió en la importancia de “conseguir apoyos institucionales” y hacer que la autoría viva valenciana esté presente “en los libros de texto y en las universidades”. Alejo anunció la creación de una federación de asociaciones de autores a nivel nacional que reivindique la mejora de las condiciones en que se ejerce hoy en día la escritura teatral.
Los escritores alicantinos de la AVEET constataron el “abandono” de la cultura en Alicante, prueba del cual, dijeron, es el hecho de que la Muestra de Teatro de Autores Contemporáneos tiene comprometida su continuidad. Después de que su director, Guillermo Heras, haya anunciado su renuncia tras 12 años de estrangulamiento presupuestario, la Muestra queda ahora al albur de unos poderes públicos que “ en nuestra ciudad no creen en el teatro ni en la cultura”, según los dramaturgos.
Otras de las cuestiones que se trataron en el encuentro fueron la escritura teatral en valencià y las dificultades de publicación en esta lengua y la autoría femenina. Las escritoras asistentes criticaron “el cuotismo vacío” de unas instituciones “a quienes les interesa más ponerse la medalla por programar a mujeres que el trabajo real de esas mujeres”.
