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esde que abriera su cuenta de Twitter en marzo de 2009, la Policía Nacional cuenta un 1.100.000 seguidores en esta red social, una cifra astronómica para un cuerpo policial, que lo sitúa a la cabeza del mundo en su categoría por delante incluso del FBI, con 980.000.
Con estos números contundentes Carlos Fernández Guerra, Social Media Strategist de la Policía Nacional, dio comienzo ayer a un almuerzo informativo en Alicante con motivo de la presentación de la tercera edición del Master en Marketing Digital y Redes Sociales que organiza EEME Business School en la ciudad el 17 de octubre y en Valencia el día 24.
Pero, como el propio Fernández Guerra enfatizó «de nada nos valen las cifras si no hay detrás una utilidad». Y ésta reside en que las redes sociales permiten a la policía «responder dudas, consultas, hacerse eco de rumores, bulos, fraudes… de forma directa, con una comunicación bidireccional muy importante», dijo. «Atendemos las dudas de la ciudadanía y le respondemos de forma inmediata; somos un call center gratuito», añadió.
«Las Redes Sociales nos han permitido canalizar el apoyo que recibe la Policía»
Otras aportaciones de las redes sociales a la Policía Nacional son las campañas de prevención, que además por esta vía salen gratuitas. En junio, lanzaron una campaña con Mireia Belmonte para evitar ahogamientos, algo que nunca antes se había hecho, reconoció con asombro Fernández Guerra, aunque en España se producen 400 muertes al año por esta causa. Hoy (por ayer), la Policía tiene previsto lanzar una campaña para advertir de las novatadas, anunció.
Un aspecto importante, no buscado inicialmente, ha sido «el retorno de la inversión», es decir los resultados operativos policiales gracias a la colaboración ciudadana on-line: una ‘twittredada’ antidroga -iniciada con la llegada de Ignacio Cosidó a la dirección del Cuerpo y el apoyo a la Policía 3.0 de seguridad preventiva y operativa- se saldó con 500 detenidos, varios de Alicante; también por este medio lograron detener a fugitivos británicos buscados por la campaña ‘Crime Stoppers’, a quienes difunden vídeos de contenido sexual con menores, a conductores homicidas…
De hecho, sólo «este año llevamos cuatro fugitivos peligrosos detenidos a través de las Redes Sociales», dio a conocer el responsable de este área de la Policía. El último de ellos, en junio en Valencia: a las 4 de la tarde hicieron un llamamiento para capturar al presunto asesino de su mujer, con un resultado de 7.300 retwitts y 40 llamadas telefónicas. Todo esto evidencia que «gracias a la colaboración ciudadana se favorece un gobierno abierto, una inteligencia colectiva», indicó.
Pero los ciudadanos no sólo acuden a las redes sociales de la Policía para plantear consultas o ayudar a resolver casos, sino también para mostrar su satisfacción ante determinadas noticias, como la reciente detención del pederasta de Leganés, que originó cientos y miles de felicitaciones y muestras de agradecimiento. En cifras, este hecho se tradujo en 100.000 interacciones en Twitter y más de 1 millón de visitas al vídeo colgado en Facebook.
Carlos Fernández Guerra reconoce, sin falsa modestia, que con estos datos son «líderes mundiales en lo cuantitativo, pero lo más importante es la utilidad a los ciudadanos». «Las Redes Sociales nos han permitido canalizar el apoyo que recibe la Policía», afirmó. Sin duda, el éxito alcanzado es fruto de mucho esfuerzo -que se nota observando a este responsable que vive pegado al móvil-, creatividad, un estilo personal y cercano de comunicación. La historia de este recorrido se recoge en un libro titulado ‘@Policia. Las historias de un éxito’ (ed. Aguilar), obra del propio Fernández Guerra, que se presentará dentro de tres semanas.
MASTER EN MARKETING DIGITAL Y REDES SOCIALES
Él mismo es uno de los profesores que integran el plantel del Master en Marketing Digital y Redes Sociales de la EEME Business School, que según detallaron sus responsables, trata de atender la fuerte demanda de este tipo de profesionales con una sólida preparación. El 88% de los alumnos de las ediciones anteriores han accedido a trabajos del sector, señalaron.
La formación de esta «escuela de negocios boutique», como ellos mismos la definen, cuenta con un 90% del profesorado venido de fuera, procedente de empresas como Google, Facebook, Amazon o Tuenti, de las principales agencias como Territorio Creativo, FCB o Hello Media y de las startups más vanguardistas, como Wouze.
El Master tiene una duración de 9 meses presenciales, con clases impartidas los viernes por la tarde y los sábados por la mañana. Una de las novedades de este año es que han añadido 100 horas presenciales más, implementando disciplinas como el neuromarketing y el marketing de contenidos; han establecido un período de prácticas en empresas de otras ciudades como Madrid y Barcelona; y han incorporado un ‘Master Trip’ con visitas a Google y Territorio Creativo.
Toda la información, en su web eeme.eu
