E
l nuevo disco del joven torrevejense Jonathan Pons, titulado ‘Mi esencia’, se dará a conocer este viernes 22 de agosto en el Teatro Muncipal de la localidad, a partir de las 22:00 h. El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Torrevieja, Luis María Pizana, presentó ayer en rueda de prensa este concierto, «un trabajo cargado de sentimiento y buena música». El evento será de entrada libre hasta completar el aforo.
El propio artista -de 21 años que comenzó su carrera musical con 18 – definió su música como flamenco-pop y explicó que en el concierto interpretará los 11 temas del disco, que se grabó en Granada, más algún otro conocido por el público. Jonathan detalló que la actuación, de una hora aproximada de duración, constará de baladas y temas más movidos, la mayoría compuestos por él y algunas versiones.
En el escenario, le acompañarán cinco músicos, batería, violín, bajo, percusión, guitarra eléctrica y guitarra (interpretada por él mismo). El disco en la actualidad está disponible en diversas plataformas digitales y se podrá adquirir en el propio recinto de la actuación a un precio de 10 €.
‘Ilusionismo en llamas’ es un espectáculo para todos los públicos, cuyo objetivo principal es «sorprender, sacar sonrisas y que la gente se vaya a casa con buen sabor de boca»
El panorama cultural en la localidad, protagonizado por jóvenes locales, prosigue al día siguiente, sábado 23 de agosto, con el espectáculo ‘Ilusionismo en llamas’, a cargo de Antonio Ortuño. Pizana señaló que el artista fue alumno de la Escuela Municipal de Teatro y actualmente pertenece a la Escuela de Arte Dramático de Córdoba.
Su actuación, que tendrá lugar en el Centro Cultural Virgen del Carmen, a las 21:30 h., consistirá en un espectáculo de magia y fuego, con fines solidarios, ya que la recaudación (3 € la entrada) irá destinada a ‘Alimentos Solidarios Torrevieja’.
Ortuño explicó que se trata de un espectáculo para todos los públicos, cuyo objetivo principal es «sorprender, sacar sonrisas y que la gente se vaya a casa con buen sabor de boca». Aunque lo suyo es el teatro y reconoce que no le gusta que le llamen mago o ilusionista, explica que él se mueve entre el showman y el actor y lo que hace es una fusión de magia y teatro. Su afición comenzó desde muy pequeño, con juegos de magia que un día abandonó hasta que retomó su pasión a través de un amigo ucraniano que le enseñó trucos de póker. Tres años después de aquello, aquí está para presentar su propio espectáculo de ilusionismo.
